El sociólogo Emilio Moya cuenta con una vasta experiencia en el área de la investigación, es Doctor en Estudios Latinoamericanos egresado de la Universidad de Chile. Además, cuenta con un Magíster en Sociología de la Pontificia Universidad Católica de Chile y actualmente se estaba desempeñando como académico de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la UCT.
El Centro de Políticas Públicas “es parte de la nueva estructura de la Vicerrectoría de Vinculación y Compromiso Público de esta universidad regional, que desde este año pasa a formar parte de los centros de incidencia pública que funcionarán bajo su coordinación, cuyo fin será generar mayor nexo entre la universidad y su entorno”, según un comunicado emitido por esa casa de estudios.
En ese mismo documento, se señala que “las líneas de investigación del nuevo director del Centro de Políticas Públicas de la UCT son ligadas a la corrupción, clientelismo político, patronazgo y élites. Realizando una gran serie de investigaciones y estadísticas en terreno”.
En esta perspectiva del CPP, Tiempo21 solicitó una entrevista a su nuevo director, para señalar los desafíos de ese centro de estudios.
¿Cuáles son sus sensaciones al asumir como director del CPP de la UCT?
-Es un gran desafío porque Cristian (Quiroz, ex director), hizo un trabajo de posicionamiento del Centro, darlo a conocer, además en el fondo darle la partida. Entonces me toca un desafío que no es menor, que es darle una mayor institucionalización seguir consolidando su participación en diferentes ámbitos del quehacer de la región. El CPP tiene que ser un articulador a mi juicio de actores que son importantes justamente para el diseño promoción y ejecución de políticas públicas en La Araucanía.
Tras su nombramiento, usted dijo que, “lo que buscamos es fortalecer e institucionalizar aún más el centro, para que tenga mayor incidencia y participación como un articulador con otras instituciones de la región”. ¿A qué se refiere con eso?
-Creo que la institucionalización tiene que ver principalmente un mayor establecimiento de prácticas que se hagan regular en el centro, tenemos Araucanía Opina, el Barómetro Regional, ver qué va a pasar con esas mediciones, qué proyectos le vamos a dar continuidad, qué proyectos quizás no vamos a poder realizar, en qué áreas nos vamos a fortalecer, qué áreas vamos a seguir haciendo, me refiero a la institucionalización más bien como una cierta especie de validación en el medio en donde estamos con respecto a lo que es el centro, porque hay otros centro también de la Universidad que tienen más años, mayor trayectoria que nosotros.
Entonces la institucionalización se refiere a ser más conocidos, generar instancias de participación del directorio y de los investigadores asociados mucho mayor, quizás tiene que ver cuando se inicia un centro como este, tiene que aunar voluntades, esfuerzos y eso Cristian Neira lo hizo bastante bien. Creo que el crecimiento y la institucionalización tiene que ver con eso.
Además, menciona que, uno de los desafíos que tiene el CPP, es consolidar su centro. ¿Cómo van a trabajar las líneas de investigación en las encuestas de opinión pública, considerando que se viene una nueva elección de constituyentes?
-Nosotros vamos a sacar una plataforma ciudadana en la cual vamos a hacer consultas ciudadanas periódicamente a través de esta plataforma. Obviamente que eso no tiene los criterios metodológicos que tiene una encuesta, pero nos va a servir para ir midiendo ciertas opiniones con respecto a ciertos temas de La Araucanía y marcando agenda. Con respecto al Barómetro y Araucanía Opina eso necesita financiamiento, el primero (Barómetro) no sólo lo hacemos nosotros solos, lo hacemos con la Ufro, y hay que ver si la Ufro está dispuesto a financiar ese proyecto en conjunto. En tanto, Araucanía Opina sí pertenece a la UCT y al CPP (…) y creo que ese es un esfuerzo institucional que debe hacer la universidad para ir desarrollando mediciones que sean confiables, que tengan un gran nivel de representatividad como esas dos encuestas y que además sirvan para algo.
Usted acaba de mencionar que el Barómetro lo hacen en conjunto con la Universidad de la Frontera ¿Han tenido conversaciones últimamente con la Ufro?
-No, porque además esto es un consorcio mucho mayor que se realizan en diferentes universidades, hay mediciones regionales y este es un consorcio mucho mayor. Creo que, en abril, mayo deberíamos ponernos de acuerdo de cómo vamos a lanzar esto.
Sobre la última encuesta de “Araucanía Opina”, se manifiestan diversos tópicos, y uno de ellos tiene relación directa con el desconocimiento de la gente en relación a los planes gubernamentales que se desarrollan en la región. ¿Cree usted que el Gobierno tiene un grado de responsabilidad en la poca o escasa entrega de información a la ciudadanía dado los resultados que ustedes entregaron?
-No sólo este gobierno, si uno mira la medición pasada o en el gobierno anterior, también había poco. Yo diría que el gobierno, pero el gobierno también hay que ver cuál es el papel que está jugando, porque están jugando las autoridades locales con la socialización de este plan, si hay articulación principalmente entre lo que se dice en Santiago y lo que se conoce a nivel local, estoy hablando desde la gobernación incluso desde los municipios. Diría que en general la gente conoce poco hasta los PDC (Plan de Desarrollo Comunal) la gente en esta misma encuesta se ve que no había leído el texto constitucional, aunque lo rechazó. También uno puede decir que hay un problema de quien emite la comunicación o la información que puede ser el organismo central, el Estado o puede ser un municipio, pero también hay un tema de la ciudadanía que quizás los medios de los cuales se informa también son otros, no sé en términos si esto es mejor lanzar un plan regional por tik tok, o instagram o por twitter que hacerlo por medios oficiales. Ahora, la radio sigue siendo una principal de fuente consultor, los medios digitales también siguen siendo una buena fuente a nivel regional, por lo tanto, también ahí el ocupar esos espacios y dar a conocer un plan que a lo mejor sería importante saber cuáles son las particularidades de ese plan.
Llama la atención que entre los resultados del sondeo Araucanía Opina 2022, la opción “a veces puede ser mejor una dictadura” aumentó de 11,6% (2021) a 23,4% (2022) considerando solo la provincia de Cautín. ¿Qué análisis hacen ustedes de esa opción?
-Preocupante, porque uno no está valorando la calidad de la democracia, no es una pregunta por cómo funciona la democracia, es una pregunta de la adhesión valórica que tiene una persona con respecto a la democracia y eso es grave, porque de alguna manera, está dando a entender que hay una mayor legitimidad a otras formas de gobierno que la democracia propiamente tal independiente si funciona bien o mal.
Pero, a ver, ¿no será que la gente entendió mejor es que “prefieren una dictadura a una democracia”? Porque también se pudo haber dado ese detalle que habría entendido mal la pregunta.
-Creo que va por ahí, en el fondo lo que nos está diciendo es que una gran parte importante de la gente le da lo mismo si es democracia o no, algunas sí prefieren una dictadura por sobre la democracia y eso sí que es preocupante en torno a una creencia en un sistema político determinado, más que si yo estoy evaluando si la democracia está funcionando o no. Generalmente las preguntas cuando te preguntan, “¿qué prefieres? O la democracia o le da lo mismo el sistema político”, en el fondo se le está preguntando a la gente si en ese momento tiene una adhesión, es decir un apoyo a un sistema político, y ahí vemos que, en el caso de La Araucanía, pero no sólo en la región, sino que a nivel latinoamericano, a nivel nacional ha caído el apoyo a la democracia como forma de sistema político.
¿No será que ese factor de que haya caído se debe también, por ejemplo, al papel que jugó Brasil con Bolsonaro que destruyó un poco las instituciones, o ahora último en El Salvador con Bukele? Porque también la gente se informa…
-Me parece que esto no hay que olvidarlo en un contexto en el cual hoy día el país está percibiendo, que hay un problema de seguridad. Entonces frente a los problemas de seguridad, me da la sensación que la adhesión a un sistema autoritario siento que la gente piensa que va a funcionar más que un sistema democrático. Creo que hoy lo que pasa a nivel nacional, el tema de la seguridad se ha tomado la agenda. Al parecer, cuando los temas de seguridad se tornan más importantes parece ser que un sistema autoritario poco democrático es mucho más eficiente que un sistema democrático para resolver ese tipo de problemas. Hay un tema de cómo se está transmitiendo la información sobre seguridad, creo que no hay que minimizarla, es un tema preocupante porque parece ser que está influenciando en la opinión de los ciudadanos y ciudadanas con respecto a otras temáticas.
Sobre la misma, la seremi de Gobierno, Verónica López-Videla dijo a este medio que, “Me parece que hay una gran responsabilidad individual primero el ejercer la política en todas sus dimensiones”, y agrega el siguiente análisis en relación a los partidos políticos los cuales, “se comenzaron a distanciar de las personas y de las reales necesidades de las personas hasta llegar a un quiebre político y social profundo” ¿Comparte estas afirmaciones?
-Creo que es un factor, no es el único. El distanciamiento de los partidos políticos la literatura en ciencia política en Chile lo viene estudiando hace mucho tiempo que efectivamente hay una propia elitización de los partidos políticos. Ahora no todos, hay algunos que han tenido crecimiento, habría que preguntarse porqué irrumpen partidos como el PDG o los Republicanos, que sí logran tener un número importante de adhesión, el PDG y el Partido Republicano sacaron parlamentarios. El tema es qué pasó con los partidos tradicionales que hoy día parece ser tienen un distanciamiento con los problemas o las necesidades reales de las personas, creo que efectivamente, no es el único factor, esto es más complejo. Bueno ella (seremi de gobierno) alude a una idea que es más liberal, está hablando de una responsabilidad individual, y no necesariamente hay una responsabilidad individual cuando tú tienes un sistema económico, cultural, en la cual ha privilegiado la forma individual que es enfrentar la vida a la forma social.
¿Cómo ha sido la participación de los encuestados, sube, baja el porcentaje de quienes se incorporan a entregar su opinión? Porque junto con conocer las temáticas consultadas, es importante saber el nivel de participación, porque esos datos se extrapolan.
-Araucanía Opina tiene dos mediciones, la del año 2021 y la del año pasado, la diferencia del antepasado sólo pudimos encuestar Cautín, y este año pudimos encuestar la región completa entonces no tienen compatibilidad en términos generales. Creo que, si la volvemos a hacer en La Araucanía completa, creo que hay que ver la tasa de respuestas o de rechazo a las encuestas, pero no se puede comparar una a otra porque son encuestas distintas.
Ahora en general aplicamos dos encuestas grandes en la región y salieron un “n” que es bastante representativo para encuestas regionales, estamos hablando de 800 casos en una encuesta, casi una encuesta nacional hoy día que se aplica por teléfono.
Finalmente ¿Qué proyecciones tienen para este año con el CPP de la UCT?
-Creo que primero es avanzar en este proyecto de plataforma ciudadana, avanzar en mesas multiactores para desarrollar e incidir en las generación y discusión de políticas públicas en La Araucanía, es importante articular encuentros entre diferentes actores de la región. También promover el trabajo que hacen nuestros académicos acá en la región, los aportes que pueden hacer a la política pública. Y me parece que el Centro también tiene algo que decir en la discusión constitucional que nuevamente se nos abre.
Escrito por: Claudio Nuñez, Tiempo21.cl Edición digital 746 Semana del 25 al 31 de marzo 2023.