Carla Escalona Oyarzo, Cientista Política, profesional del Centro de Políticas Públicas de las UCT realizó un análisis del contexto en que llegó el anuncio del Gobierno del Presidente Gabriel Boric sobre decretar Estado de Excepción en la macro zona sur y es que pese a que en su propuesta programática se planteó la necesidad de buscar una Estrategia Nacional de Resolución Pacífica de Conflictos y de Convivencia, y que durante los dos primeros meses de su mandato se rehusara a realizar este decreto, este lunes y ante la urgencia de reducir los niveles de conflicto territorial, se decretó el Estado de Excepción para las provincias de Arauco, Bío-Bío y la región de La Araucanía.
Desde el 11 de marzo la vía de establecer el diálogo y convocar a todos los actores de la sociedad ha resultado en transitar por un camino agrietado y no exento de polémicas por la no renovación del Estado de Excepción por parte del Ejecutivo. Sin embargo, ante la insistencia de algunos actores político para que el Gobierno decrete nuevamente un Estado de Excepción, el Presidente de la República señaló la importancia de avanzar en el diálogo y en la seguridad nacional, por tanto, la iniciativa en la que estuvo trabajando el comité político se enfocaba en un estado de carácter intermedio, lo que significaba desplegar a los militares sólo a las principales rutas y caminos como protección a la infraestructura crítica.
Estado intermedio
Al respecto, la respuesta por parte de los parlamentarios oficialistas y de oposición no se hizo esperar. Por un lado, la oposición consideraba que la medida propuesta por el ejecutivo es necesaria pero no suficiente, por tanto, el Diputado Jorge Rathgeb (RN) señaló que “El Gobierno no ha sido claro en determinar los alcances que tendría este Estado intermedio”, Por otra parte, la Diputada Gloria Naveillan (REP) declaró que “el presidente tiene un diagnóstico errado de lo que pasa en La Araucanía y el ejecutivo no implementa el estado de excepción por un tema ideológico”.
En tanto, el Diputado Eric Aedo (DC) declaró con muy buenos ojos que la medida propuesta por el ejecutivo es “Un avance respecto a lo que teníamos hace unos días atrás, es decir, el Presidente y el Gobierno se percatan de que tienen una situación compleja y difícil operando en la Macrozona”. Muy por el contrario, el Senador Fidel Espinoza (PS) señaló que la medida propuesta es una medida inviable y sostuvo que “es una medida que tenemos que rechazarla”.
Sumado a las reacciones del mundo político también se debe agregar la reacción del líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM) sobre su negativa por la eventual implementación de un Estado intermedio. Al respecto, Héctor Llaitul llamó “A preparar las fuerzas y organizar la resistencia armada”. En este sentido, para el líder de la CAM, la implementación del Estado intermedio significa “la expresión en pleno de la dictadura militar que los mapuche siempre hemos sufrido”.
Sin embargo, el tiempo de respuesta se agotó y los acuerdos políticos entre el oficialismo no obtuvieron los resultados esperados, por dicha razón, el Gobierno decidió aplicar un nuevo Estado de Excepción con carácter acotado y de emergencia para La Araucanía y las provincias de Arauco y BioBío, “olvidando la opción “intermedia” que venía negociando con los partidos oficialistas”.
Con dicha medida, el Gobierno busca establecer una señal de querer abordar la situación de violencia vinculada al robo de madera y narcotráfico presente en las regiones mencionadas, reconociendo las dificultades que significó la iniciativa de “Estado intermedio”.
Garantizar la seguridad y libre tránsito
La ministra del Interior y Seguridad pública, Izkia Siches, enfatizó la importancia de investigar organizaciones criminales que se dedican al narcotráfico y al robo de madera, “para dar garantías a todas las partes que se perseguirán los delitos como la ley mandata y decretar el Estado de emergencia acotado permitiría el libre tránsito de las personas”.
En este sentido, se regirá según detalla el artículo 5 de la Ley Orgánica Constitucional de los Estados de Excepción, el jefe de la Defensa Nacional que se designe tendrá las atribuciones de asumir el mando de las Fuerzas Armadas, de Orden y de Seguridad de Pública que se encuentren en la zona; Autorizar la celebración de reuniones en lugares públicos, controlar la entrada y salida de la zona y el tránsito en ella, entre otras atribuciones para el mantenimiento del orden interno.
Decepción
En este escenario, el anuncio fue catalogado como decepcionante por parte de parlamentarios de la oposición, mientras que, desde Apruebo Dignidad y partidos oficialistas se destacó el proceso de diálogo e inyección de recursos. Más aún, las autoridades regionales valoraron el anuncio de la Moneda. El Gobernador de La Araucanía, Luciano Rivas, señaló que “El anuncio del Gobierno demuestra la importancia de escuchar la voz de las regiones”.
Mientras que la Gobernación del Bío Bío valoró la iniciativa, señalando que “la única preocupación es la seguridad y tranquilidad, de las y los habitantes del territorio”. Por lo tanto, el camino para buscar soluciones conjuntas al conflicto histórico que aqueja al Estado Chileno y Pueblo Mapuche, ha sido complejo, marcado por una serie de negociaciones y reparos.
El camino sobre el manejo del conflicto está marcado por relaciones sociales, económicas y políticas establecidas a lo largo de un proceso extenso que claramente no tendrá una solución de una semana para otra y es necesario reducir el nivel de confrontación para que existan acuerdos políticos, en particular dentro del propio Gobierno y así se logrará llevar a cabo las medidas de solución que la ciudadanía necesita en materias de seguridad nacional.